La relación
arte-naturaleza ha marcado las prácticas artísticas
y las teorías del arte a lo largo de la Historia. No obstante este binomio,
arte-naturaleza, ha variado mucho y ha significado en cada época
algo diferente: en la Grecia antigua el arte imitaba a la naturaleza,
durante el Romanticismo se alababa a la naturaleza por su carácter
sublime, mientras que en el Impresionismo fue puesto el énfasis en
la luz y la temporalidad de la naturaleza.
El suelo
El agua
El aire
La energía
Consumo y desarrollo local